Para este año el Equipo de Comunicación Provincial nos presenta una nueva propuesta para llegar a toda la Familia
Sa-Fa y profundizar en nuestro carisma desde el documento “Escuelas Sa-Fa para el mundo”, a través de esta publicación.
Durante el año haremos cuatro publicaciones de “Nos Encontramos” y en cada una de ellas se mostrarán las variadas actividades
que reflejan los diferentes ejes de dicho documento.
Verán plasmados en sus páginas cómo cada uno de estos aspectos del carisma es
vivido en nuestras comunidades. No se trata solo de informar sino de trasmitir las vivencias y las experiencias que se dan en nuestras Obras siguiendo el
camino que nos trazó el Vble. Hno. Gabriel.
Esta primera entrega del año será “Desde nuestro carisma: Somos escuelas universales. Seguimos las huellas del Hermano Gabriel, mirando a la Sagrada Familia, para construir la Comunidad Educativa con “espíritu de familia”. Y como Familia Sa-Fa acogemos a todos, caminamos juntos y trabajamos en equipo. Creando redes y lazos que nos unen”. Estamos educando para una civilización de la fraternidad universal y el cuidado de la “casa común”.
Nuestro carisma nace en la Iglesia por impulso del Espíritu Santo, en la persona del Hermano Gabriel Taborin. Su experiencia de vida y de
acción evangelizadora es una inspiración constante y una indicación precisa para quienes deseamos compartir hoy su proyecto.
La vida
del Hno. Gabriel constituye una llamada a una mayor fraternidad tanto para la Iglesia como para el mundo y nosotros hoy, Hermanos y Laicos que compartimos
ese mismo proyecto, estamos llamados a seguir sus huellas con su misma fe e idéntico entusiasmo.
El Hno. Gabriel fue ante todo un animador. Ya desde pequeño mostró su capacidad de convocar, de reunir y guiar. Propuso actividades e iniciativas para que la comunidad cristiana tomara conciencia de sí misma. Supo impulsar procesos de formación y crecimiento. Animaba a la comunidad desde dentro siendo sencillo y cercano. Llegó a la gente no por sus estudios y conocimientos, sino por la experiencia y las convicciones profundas que transmitía. De “temperamento fuerte y decidido”, supo dejarse guiar, con la valentía y la humildad de empezar de nuevo después de cada fracaso y mantuvo firme su proyecto hasta el final, adaptándolo a los cambios que se fueron dando en la Iglesia y en la sociedad de su tiempo.
Sigamos el sueño de Gabriel, mirando a la Sagrada Familia, para seguir construyendo juntos, un mundo más humano y más fraterno.
Hno. Edgardo Bruzzoni
Animador Provincial
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